¿Puedes creerlo? Un producto genial, a un precio justo, ubicado en el lugar correcto y no logra buenas ventas. ¡Esta historia está mal contada! Si quieres descubrir que le pasa a este desconocido, ten un poco de paciencia.
El mundo a tu alrededor cambia de forma acelerada. Ya sé que te diste cuenta. La forma de comunicarte con tus clientes ya no es la misma. La venta directa ha disminuido su poder persuasivo. Si quieres que te atiendan, saca tus dotes de conquistador y a enamorar se ha dicho. ¿Dónde?, pues en el mundo digital, allí se encuentra una parte importante de tu cliente ideal.
¿Qué es el Storytelling?
El Storytelling es el arte de contar historias que conecten al narrador con su audiencia en el plano afectivo. Para tu emprendimiento esto solo tiene sentido si logras expresar los deseos de tu público objetivo a través de un cuento. El desenlace ya lo conoces, el personaje principal encuentra la respuesta en lo que tiene que ofrecer tu marca.
El comportamiento del consumidor ha evolucionado. Existe un mercado saturado de ofertas donde es difícil encontrar la diferencia. Si antes enfocabas tu mensaje en qué es lo que vendes, ahora la atención está en el porqué. Si sigues contando que tu producto tiene 100 cm, puede ser en 10 colores, y se usa para flotar, vas mal.
Esta persona está encantada de pagar el precio que has fijado, porque tú lo vales. ¿Ya te suena de algo? Tú sientes confianza y empatía por tu cliente ideal y lo mejor es que ese sentimiento es recíproco. Ahora mismo te vino a tu cabeza el nombre de una cliente actual, es tal y como te la describí, es Malena.
Imagínate que seas capaz de captar millones de Malena, que bien iría tu negocio. No exagero, los emprendedores como tú saben que el cielo es el límite.
Para captar la atención de Malena tienes que hablarle a ella. Una mujer independiente, con estudios, que su día es así y se siente de esta forma. Ella es residente en España, tiene 35 años es madre soltera y amante de todo lo que haces. Este es el único camino para captar su atención, y mejor aún, ganarte su decisión de compra positiva.
¿Por qué una buena historia hace la diferencia?
Nuestra conducta está motivada por una parte cognitiva, los datos que procesamos del entorno. Por ejemplo, las características físicas de tu producto. Pero, además actuamos bajo la influencia de las emociones.
Nuestro lado racional nos presiona a analizar los datos en detalles, aunque no seamos expertos. Si se trata de emociones, recordamos y actuamos de forma natural e instintiva. Está científicamente demostrado que las emociones guían el 80 % de nuestras decisiones.
El relato es una vía natural de comunicación. En ese momento tu cliente no espera que le vendas nada. Está más receptivo. Entre tanto ruido publicitario es una forma de captar su atención. La curiosidad a todos nos puede. Una buena historia es más fácil de recordar que dimensiones frías de un producto, ¿a que sí?
¿Cómo contar historias que atraigan a tu cliente ideal?
Me rindo a las fórmulas, sí son muy útiles. Tú no tienes tiempos para leer por una hora cómo resolver tu problema. Necesitas vender más a través de internet, tu método comunicacional no logra tus resultados esperados. Es hora de introducir el Storytelling.
Te muestro que no debe faltar en una historia a través de estos 5 componentes:
- El protagonista: Este es alguien igualito a tu cliente ideal. Si identificas cuál es su arquetipo de personalidad te pueden ser muy útil.
- El enemigo: Es la persona o la circunstancia que quiere desviar al protagonista de su objetivo.
- Conflicto: la lucha del protagonista por vencer a su enemigo y lograr el cambio que tanto desea.
- Desenlace: Cuando el protagonista alcanza su propósito.
- Moraleja: Es posible alcanzar el objetivo si… En estos puntos suspensivos está la conexión indirecta a tu producto.
Luego, si la fórmula no te funciona es que no entendiste la esencia. Como no quiero que esto te pase te cuento.
Los 3 secretos de una buena historia
- Tienes que conocer muy bien a tu cliente ideal
Te dejo una lista de interrogantes, si la respondes por escrito será de gran ayuda para que no pierdas el norte en tus contenidos. Esta es la única forma de lograr historias que vendan. Un protagonista con el que tu cliente ideal siente una gran empatía.
- ¿Quién es? Sus características socio demográficas y psicológicas te ayudarán a describirlo.
- ¿Qué motiva su compra?
- ¿Qué hace? Imagínate su rutina.
- ¿Qué ve y qué escucha?
- ¿Cómo piensa en torno a su necesidad insatisfecha?
- ¿Cómo se siente, qué anhela, qué le duele?
- Existe un solo mensaje
Si deseas contarle a tu audiencia sobre 10 valores que defiendes terminarán por conectar con pocos y recordar a ninguno. ¡Céntrate!
Un mensaje+ Una moraleja= Una buena historia
- Sé concreto
Las historias concretas tienen detalles. Estas describen movimientos, sonidos, estados anímicos. En fin, crean un ambiente donde quién lee es capaz de oler y degustar.
Ejemplos de historias que puedes contar
- Tu propia historia de superación
- ¿Cómo tu marca llegó al lugar en donde está?
- Historias que describen el propósito de tu marca, muestran un valor que defienden.
- Historias de aprendizaje y evolución
- Historias enfocadas a responder la objeción principal de tu cliente ideal.
- Historias que muestren los resultados de tus clientes luego comprar tus productos.
- Historias que ilustran un concepto.
Y es así como tú aprendiste a contar historias que convierten a totales desconocidos en tus más fieles clientes. Sí, mi historia, tiene un final feliz, ¿y la tuya?
Te cuento que si deseas conseguir que tu audiencia ejecute una acción hacia tu marca te aconsejo los finales en el que protagonista triunfa. Si la idea es una campaña de bien público donde necesita que los internautas dejen de hacer algo, pues allí tienes el final trágico.
